Saltar al contenido
Portada » Los gilipollas

Los gilipollas


Miguel Vigil – 1 de abril de 2024

El mundo está lleno de gilipollas. Los hay de todo tipo, pero tienen un denominador común: son gilipollas. Y además son ignorantes, no saben que son gilipollas. Los hay de muchas clases, pero hoy nos centraremos en esos que van al cine a comer palomitas y a mandar mensajes por el móvil. No van solos, no, van en grupos numerosos, aunque no se conozcan, es como si el instinto de gilipollas les guiará para hacer el gilipollas en compañía de otros gilipollas. Los que parecen menos gilipollas comentan que las palomitas y el refresco salen más caros que el cine en sí.

-Cariño, acabo de pagar más dinero por los refrescos y las palomitas que por el cine.

-Bueno, un día es un día, para eso trabajamos toda la semana.

¿Para qué trabajáis toda la semana? ¿Para gastaros una fortuna en palomitas y refrescos? ¿Se da usted cuenta de que son gilipollas?

Una vez dentro de la sala el ruido de tropecientas bocas masticando palomitas y sorbiendo refrescos te impide escuchar la película, y las numerosísimas pantallas de móviles mandando y recibiendo mensajes te distraen visualmente de la película. De ahí viene la crisis del cine, y no por culpa de la industria, o del IVA, o de zarandajas por el estilo, porque los verdaderos cinéfilos no soportamos ver una película en esas condiciones y hemos dejado de acudir a las salas, preferimos la austeridad técnica de nuestro televisor que se compensa con el silencio absoluto de nuestra sala de estar. Y sin tener que soportar a ningún gilipollas, más que a nosotros mismos.